Método de aprendizaje
kZoomi’s Proactive Swimming es un programa de estimulación de la percepción háptica: acción voluntaria a través del tacto y la propiocepción. Está dirigido al aprendizaje, potenciación y mantenimiento de las posturas básicas en cada uno de los estilos de nado, actuando como pilar vertebrador de una técnica eficaz, económica y de protección de la salud músculo-esquelética y emocional.
Su utilización está recomendada tanto en niveles de iniciación como en el desarrollo, mantenimiento y elevación del nivel deportivo de nadadores y triatletas en etapas de competición y alto rendimiento.
La pasión, dedicación y sensibilidad por este deporte, tan complejo como fascinante, así como la observación y experimentación durante años de los comportamientos comunes del ser humano en el agua durante las fases de aprendizaje, competición y alto rendimiento; han propiciado el análisis, la creación y aplicación de los productos y del método kZoomi’s Proactive Swimming.
Cabe destacar que este método está englobado en un todo mayor, un modelo que se nutre de fuentes como la psicopedagogía, la psicología, la didáctica, la biomecánica, la biología y las distintas ciencias relacionadas con la adquisición y entrenamiento de las habilidades acuáticas, teniendo en cuenta siempre los valores asociados a las emociones del ser humano.
De esta forma, el método pretende funcionar como herramienta de uso en el proceso didáctico, anticipándose a las posturas más comunes que limitan el rendimiento y propician lesiones famosas como el “hombro de nadador”. El uso adecuado de los materiales, bajo las consignas y directrices que iremos proponiendo, junto con un toque de emotividad positiva fundamental, te hará llegar a un nivel de habilidad y adaptación acuática acorde a tus objetivos y expectativas. Nuestra aportación a este deporte es una obligación impuesta por el sentido lógico evolutivo que todos llevamos implícito y que se manifiesta sin remisión.
Estamos creando ayudas para que no desperdicies energía banalmente en el agua y equilibres tus fuerzas para mejorar la propulsión y minimizar la resistencia. Este fluido se desplaza cuando aplicamos presión sobre él. La optimización de las posiciones de tus áreas propulsivas, los ángulos de ataque adecuados, la fuerza necesaria (no más), la estimulación de la sensibilidad oportuna, la colocación y mantenimiento del resto de segmentos corporales, la sincronía y armonización de todo el cuerpo como unidad; te devolverán una resultante de propulsión que te hará disfrutar de tus entrenamientos, convirtiéndolos en emocionalmente constructivos y dejando una huella imborrable en tu cerebro. Nuestros propósitos intentan abrir líneas de investigación que redunden en un mayor beneficio a la sociedad en su conjunto, verdadera destinataria de los esfuerzos de todo descubrimiento, creación y práctica científica.
J. Bonal Pedrón